Un mural vibrante y dinámico al estilo cómic, que captura la esencia de Cobra Studio en una escena intergaláctica. Una colorida nave espacial, adornada con luces neón y diseños futuristas, flota sobre las azoteas de Manhattan. Desde sus ventanales, se escapan ondas de música que se visualizan como notas flotantes y colores brillantes que parecen danzar en el aire.

Dentro de la nave, un grupo de robots con un estilo caricaturesco, cada uno con personalidad propia, se afana en una gran sesión de DJ. Uno de ellos está mezclando en una consola, mientras otros bailan al ritmo, transmitiendo la energía de la música.

En el fondo, las icónicas siluetas de los rascacielos de Manhattan se alzan, iluminados por luces de colores que emulan la vida nocturna de la ciudad. Los edificios parecen vibrar al compás de la música, mientras que el cielo está salpicado de estrellas y un par de planetas lejanos, creando una atmósfera mágica y cósmica.

El mural está lleno de detalles que evocan el poder de la música: ondas sonoras, luces destellantes y pequeños gráficos de baile que parecen saltar fuera de la pintura. En la parte superior, el nombre “Cobra Estudio” se presenta con la luz que recuerda a Batman, recordando a todos la energía única que surge de este lugar especial.

Este mural no solo es una obra de arte, sino una celebración de la música, la creatividad y la conexión que crea entre el estudio y la vibrante ciudad de Nueva York.